30 mayo, 2024

Educar con Ajedrez: ¿Qué beneficio tiene en la vida de un niño?

 


Educar con Ajedrez: ¿Qué beneficio tiene en la vida de un niño? Imperdible


El ajedrez es un juego y un deporte ideal para complementar la educación de un niño, aprende acerca de los beneficios que aporta y saca de esta disciplina el máximo provecho.


El ajedrez es un deporte que requiere de un esfuerzo intelectual considerable, lo que ha llevado a muchos padres a pensar qué tan beneficioso podría ser para sus hijos y como es de esperarse, este interesante juego tiene bastantes cosas que aportar y en el siguiente análisis, revisaremos a detalle todo lo que tiene para ofrecer a los más pequeños de la casa.

Ajedrez: un deporte para la mente

El ajedrez si bien es un deporte en toda regla, es innegable que tiene una particularidad en comparación con otros y es que, el principal aspecto a entrenar, es la mente, un rasgo que aunque también es importante en otros deportes, acá se vuelve indispensable debido a la naturaleza del juego en sí.


Para empezar, tendemos a relacionar deporte con esfuerzo físico, ya que muchos de estos, se basan en la agilidad de quien lo practica. De hecho, tenemos varios ejemplos a recluir, como lo serían el fútbol, el básquet, el béisbol, boxeo y natación, solo por mencionar algunos.


Como se puede ver, el patrón principal de todos yace en adiestrar el cuerpo de tal manera, que luego seremos capaces de ejercer movimientos únicos que están relacionados con el deporte en cuestión que estamos practicando.


Dicho de otra forma, al practicar fútbol, seremos no sólo más ágiles con las piernas a la hora de correr, sino que también podremos manipular un balón con ellas. En el básquet ocurre lo mismo, nos hacemos más diestros para rebotar un balón con las manos mientras nos movemos y en el béisbol, conseguimos una mejor coordinación mano-ojo para batear la pelota.


Todos los deportes que se practican, mejoran nuestro físico de una u otra forma, y es acá, en donde toca ver cuál es la relación que se obtiene si se entrena continuamente en el ajedrez, un deporte que de buenas a primera, no requiere de un esfuerzo físico en el sentido habitual de la palabra.

Una mente más ágil

Como pudimos leer más arriba, los deportes de contacto tienden a mejorar nuestro físico, y esto puede llevar a preguntarnos qué puede mejorar el ajedrez en nosotros, después de todo, el esfuerzo físico acá es casi inexistente, pero en su lugar, los jugadores de este deporte, deben presionar en otro ámbito y es la mente.


¿Han escuchado que el cerebro es otro músculo más? ¿Qué pasa cuando se entrena constantemente un mismo músculo? Bueno, el resultado de estar visualizando jugadas que no han ocurrido, de predecir patrones que no se han dado, de idear estrategias para sobrepasar las defensas del adversario, hacer todo eso de forma constante, termina por dar sus frutos.


Seguramente algunos podrían llegar a citar que en los otros deportes, todo eso se hace y aunque estamos de acuerdo en que si, no tiene el mismo peso, ya que en el ajedrez, todo se centra en qué tan rápido podemos analizar el tablero para luego, mover la pieza adecuada en el momento justo, lo que nos lleva, a predecir o por lo menos, intentar hacerlo con la mayor exactitud posible.


En consecuencia por estar haciendo esto de forma constante, es decir, por estar practicándolo una y otra vez, el jugador de ajedrez logra adiestrar una mente más perspicaz dentro del tablero, llegando incluso a poder jugar con tiempo, lo que representa un reto considerable. Por otro lado, acá solo estamos hablando de los beneficios generales, pero ¿qué pasaría si un niño comienza a temprana edad con esto?

Los niños y el ajedrez

Practicar un deporte a cualquier edad, siempre será productivo para quien lo haga sin importar la edad, y hacerlo con constancia, también nos ayudará a mejorar progresivamente, no obstante, si todo esto son los beneficios que se pueden conseguir sin ser tan meticuloso ¿hasta dónde podría llegar alguien que comience desde temprana edad?


Ya en este punto, estamos hablando de enseñarle a un niño no solo a jugar ajedrez, sino también, inculcar toda la disciplina que conlleva practicar este deporte de forma constante y acá, ocurre lo mismo que con otros deportes que se comienzan a temprana edad, el niño contará con los beneficios que este ofrece, al mismo tiempo que mejorará mucho más rápido de lo que lo haría alguien que empieza con una edad más avanzada.


Un niño que comienza a practicar ajedrez a temprana edad como deporte, desarrollará habilidades que solo se pueden conseguir si se ejecuta este patrón o por lo menos, las posibilidades de que las desarrolle, son por mucha más altas que de no hacerlo y esto es gracias, a que el cerebro de los más pequeños, aprenden con más facilidad debido a que aún están proceso de crecimiento, lo que termina por volverse una ventaja.


Por consiguiente, el ajedrez se ha convertido para muchos padres, en un pilar fundamental en la crianza de sus hijos y con justa razón, ya que si bien no desarrollan la parte física como con los deportes de contacto, agilizan muchísimo más la mente, lo que se traduce en diferentes beneficios que en las próximas líneas, desarrollaremos con más detenimiento.

¿Cuáles son los beneficios que ofrece el ajedrez a los niños?

Si practicar un deporte de contacto mejora el físico de los niños, lo que incluye los músculos y su resistencia, practicar un deporte que se basa en la mente, presentará beneficios relacionados con el intelecto.


En este caso, los hemos separado en 6 puntos, y aunque pudieran haber más, para efectos de este análisis, los revisaremos de esta manera para que puedan tener una idea más clara de lo que puede ofrecer el ajedrez a quienes lo practican desde temprana edad.

1- Potencia el razonamiento y el pensamiento lógico

El ajedrez se basa en predecir los movimientos del rival, al mismo tiempo que también requiere de que seamos capaces de idear estrategias sólidas para poder sobrepasar las defensas del adversario.


Hacer todo lo anterior, obliga al niño o niña, a razonar detenidamente cuáles piezas puede mover al mismo tiempo que está prediciendo las que moverá el rival. Todo ese ejercicio de forma constante, termina por desarrollar la parte lógica y el razonamiento del joven.


Hacer todos esos cálculos con un tiempo limitado y a tan corta edad, genera un patrón de calma y análisis que ayudará a los más pequeños a mantener la serenidad en situaciones de estrés, por lo que pensará antes de tomar una decisión, por lo que será capaz de controlar la impulsividad mientras que mejora su análisis.


Esto se convierte en una herramienta especialmente útil en sus estudios de la misma forma que lo puede ayudar en las relaciones sociales tanto con otros niños como con personas mayores.

2 - Coordinación y destreza motora

Anteriormente mencionamos que el béisbol y en general, los deportes de contacto, son buenos para desarrollar la coordinación mano-ojo, lo que podría entenderse que eso solo se obtiene de un deporte de contacto, sin embargo y para sorpresa de muchos, esto también puede conseguirse del ajedrez.


Generalmente solemos asumir que la coordinación mano-ojo depende de la velocidad con la que reaccionamos ante lo que estamos viendo y aunque esto pueda definirlo bastante bien, también debemos agregar que la velocidad de respuesta no es lo único que ayuda a desarrollar una mejor coordinación.


En este caso, cuando el niño o niña es bastante pequeño (de edad), coordinar sus movimientos requiere de mucho esfuerzo y concentración y ahora, aplicar esto en un tablero con un tamaño determinado, en donde debe escoger la pieza correcta y ubicarla en la casilla a la que quiere moverse, indudablemente, también lo ayudará a mejorar su coordinación mano-ojo.


Esto se traduce en que el niño, mejorará su precisión motora, pero eso no es todo, ya que también será capaz de visualizar situaciones en el corto plazo, una cualidad que le sentará de maravilla en todo momento.

3 - Pensamiento científico

Cuando hablamos de ciencia, es habitual relacionarla con experimentos, una definición que podría coincidir bastante bien, pero ¿cómo llevamos esto al ajedrez? Bueno, como muchos ya sabrán, el ajedrez trata de mover nuestras piezas en un tablero de 64 casillas con el objetivo de capturar al rey enemigo, quien también cuenta con los mismos recursos que nosotros, siendo estos las mismas piezas y misma cantidad.


Desarrollar una estrategia que sea lo suficientemente buena para vencer a nuestro rival, es una ardua tarea que dependerá de qué tan bueno sea este, pero en cualquier caso, es necesario poner en práctica el mismo principio que vemos en la ciencia y se trata, de la experimentación.


Experimentar con nuevas jugadas y con diversas estrategias, es clave para convertirnos en un buen jugador y en el caso de los niños, aprender este principio a tan corta edad, le enseñará a desarrollar la mecánica de ensayo y error, muy conocida por basarse en el principio de que hay que intentarlo sin importar que fallemos, ya que con la práctica, mejoraremos.


El pensamiento científico se materializa en el ajedrez en el momento en que los niños, comienzan a planificar diferentes jugadas, lo que los ayuda a analizar situaciones complejas dentro del tablero y que proporcionalmente, se convertirá en una habilidad que podrán extrapolar a la vida real, y aunque no es tan sencillo analizar nuestras propias vidas, es innegable que se reflejará como una herramienta muy útil en su día a día.

4 - Pensamiento estratégico y toma de decisiones

Esta es probablemente, la cualidad que mejor se refleja en los jugadores de ajedrez y no es para menos, ya que prácticamente, esto es lo que separa a los principiantes de los profesionales.


Hacer estrategias sobre la marcha, tomar decisiones que se ajusten a lo que está pasando en el tablero, es posiblemente, la habilidad más importante que debe desarrollar todo ajedrecista, ya que estas son la diferencia entre ganar o perder una partida.


Un niño o niña que crezca jugando ajedrez, será capaz de aprender este principio muy rápido, y comprenderá que para ganar sus partidas, debe ser lo más estratégico posible, lo que a su vez, lo obligará a tomar decisiones importantes que podrían ser el principio de una gran victoria o de una derrota.


¿Cubrir esa casilla? ¿Mover a la reina? ¿Controlar el centro con la torre? Son muchas de las preguntas que los niños pueden hacerse en medio de una partida y al mismo tiempo, debe responderla con la mejor decisión posible, y esta cualidad, también se extrapola a sus vidas cotidianas.


¿Qué tarea debo hacer primero? ¿Cómo debo hacerla? ¿Necesito ayuda o puedo solo? Como se puede leer, esas preguntas parten desde el mismo principio que aprendió en el ajedrez. La toma de decisiones y lo que esto implica, puede convertir al niño más inquieto, en el más planificador de todos.

5 - Perseverancia y paciencia

Muchas veces se suele asociar el ajedrez con un deporte muy callado y quizás, hasta algo aburrido para un niño por el hecho de que no están saltando y gritando, sin embargo y contrario a lo que algunos pudieran llegar a pensar, justamente esta característica de mantenerlos callados, los ayuda a desarrollar lo que se conoce como perseverancia y paciencia.


Mantener a un niño concentrado en una misma actividad por minutos e incluso horas, puede ser una tarea titánica para los padres, ya que el pequeño podría cansarse o aburrirse en el proceso, pero en el caso del ajedrez, este le enseña a los niños a desarrollar una mente calmada que les permitirá concentrarse en una misma actividad, y en esta oportunidad, los llevará a hacerle jaque mate al rey adversario.


Mantener la mente concentrada por tanto tiempo en una misma actividad, dará los mismos resultados que alguien puede conseguir entrenando con un deporte de contacto, con la diferencia, de que la recompensa se verá a nivel mental. El niño o niña, desarrollará una resistencia mental por encima de la media, lo que se materializa en su vida cotidiana como un mejor control en actividades prolongadas.


Un niño que aprende sobre la perseverancia y la paciencia a tan corta edad, indudablemente podrá llevarla al siguiente nivel antes que muchas personas que no le pusieron cuidado a estas, una cualidad indispensable para que al crecer, se conviertan en adultos y hechos y derechos.

6 - Mejora la memoria

El ajedrez nos lleva a un deporte en el que cada jugador, con sus 16 piezas, debe enfrentarse al adversario que también tiene las mismas 16 piezas que nosotros. Para ello, es indispensable aprenderse los movimientos que cada una puede hacer, de igual forma, también es necesario recordar las reglas que rigen este juego.


Una vez hecho lo anterior, toca aprenderse los patrones que nos permitirán desarrollar las jugadas que solo son posibles cuando ciertas condiciones se dan, y con esto en mente, los niños mejorarán su memoria, ya que todo lo anterior, no solo deben recordarlo, sino ponerlo en práctica una y otra vez, lo que agilizará su capacidad para pensar.


Un niño que a corta edad ya está recordando los movimientos de 16 piezas, los patrones para atacar y defenderse, diferentes tipos de apertura, cómo controlar el centro del tablero y cómo dar jaque mate dependiendo de las piezas que tiene disponible, indudablemente pondrá a trabajar su memoria de manera vivaz.


Los niños que juegan ajedrez, no solo tendrán una mejor memoria dentro del tablero, sino que también podrán poner en práctica esa misma cualidad en el día a día, recordando cuáles tareas tienen pendiente, cómo hacer sus ejercicios de matemáticas, entre otras asignaciones.


Como hemos podido leerle, los niños que crezcan con una educación que tenga presente el ajedrez, podrán desarrollar de forma saludable, los 6 puntos que hemos explicado anteriormente, lo que a su vez, les permitirá desarrollar otras habilidades que los ayudarán a afrontar la vida a medida vayan creciendo.

¿Qué estudios comprueban que el ajedrez es beneficioso para los niños?

Hasta ahora, hemos hablado de la infinidad de beneficios que el ajedrez puede brindarle a los niños en su vida, lo que claramente lo hace muy llamativo para los padres, sin embargo, muchos pueden preguntarse cómo podríamos estar tan seguros de que todo lo hemos mencionado acá es una realidad.


Después de todo, habrá quienes crean que en lugar de mejorar todas esas habilidades en los niños, podría estresarlos por el hecho de tener que estar concentrados todo el día o por carecer de falta de estímulo físico, como correr, gritar o patear.


No obstante, no hay de qué preocuparse, ya que hay diversos estudios que demuestran que el ajedrez es beneficioso para los niños que lo juegan desde temprana edad y a continuación, les compartiremos algunos y lo desean, pueden averiguar más sobre estos.

Mejora el razonamiento matemático

La Universidad de Trier ubicada en Alemania, llevó a cabo un estudio con niños de primaria, el cual contó con un tiempo estimado de 4 años, en donde los participantes, jugaron al ajedrez por lo menos, una hora a la semana.


El resultado no solo se reflejó en el tablero, sino que también consiguieron mejores notas en matemática en comparación con aquellos que no formaron parte del estudio, lo que demuestra que lo aprendido en el ajedrez, puede aplicarse al día a día.

Mejora la funciones cognitivas del cerebro

La Universidad de La Plata, ubicada en Argentina, realizó un estudio en niños con edades comprendidas entre los 8 y 12 años, en donde se identificó que aquellos que jugaban al ajedrez con frecuencia, desarrollaron una mejor memoria de trabajo, flexibilidad cognitiva y planificación.

Estos resultados, se compararon con los de otros niños que no juegan al ajedrez, destacando que aquellos que sí lo practican, tienen más probabilidades de desarrollar las cualidades antes mencionadas.


Como se puede ver, tenemos 2 estudios avalados por universidades reconocidas que demuestran los resultados que ofrece jugar ajedrez a temprana edad, no obstante, debemos destacar que hay muchos otros estudios, pero para efectos de esta revisión, los que hemos citado nos sirven para exponer nuestro punto. En cualquier caso, si desean indagar más sobre el tema, lo invitamos a hacerlo.

¿Es recomendable educar a nuestros hijos con el ajedrez?

Después de todo lo que hemos leído, esta pregunta se puede responder sola ¿Es recomendable educar a nuestros hijos en el ajedrez? La respuesta a esto, es un rotundo sí, sí es recomendable que el niño o niña, tenga contacto con este deporte y aprenda las bases sobre este.


Aprender a jugar a ajedrez no solo lo ayudará a mejorar en este juego, sino que también reforzará otra cantidad de cualidades que son indispensables en el día a día. Sin embargo, es necesario que el niño tenga un acercamiento saludable, por lo que no debe tratarse de una imposición u obligación, sino más bien, debe percibirlo como un complemento, como una ayuda y un entretenimiento acorde a su edad.


Es por ello que si bien lo recomendamos encarecidamente, el niño debe tener un acercamiento que se adapte a sus necesidades y si todo esto se consigue como debe ser, los resultados se irán reflejando en el propio comportamiento del joven.

Acompaña a Alondra Bagatella en su carrera como ajedrecista

La joven Alondra, oriunda de México, tuvo acercamiento muy temprano con el ajedrez, lo que se ha traducido en una carrera muy intensa, en donde ha conseguido ser campeona de varias competiciones, lo que confirma una vez más, que practicar ajedrez desde pequeños, da sus resultados positivos.


Sin embargo y pese a que la carrera de la pequeña Alondra está dando sus frutos, poder concentrarse totalmente en esta disciplina, no es nada sencillo, sobre todo en el tema financiero, ya que costear los viajes, los hospedajes y demás, representan un gasto considerable.


Es por ello que los invitamos a colaborar con cualquier aporte monetario que deseen hacer a través de los siguientes canales de donación. Toda ayuda será bien recibida y estaremos muy agradecidos con su participación.


En caso de que tengan alguna duda o inquietud, pueden consultar en la siguiente información de contacto y de antemano, les agradecemos por haber llegado hasta acá.


Contacto WhatsApp: +52 33 8000 0888 

Correo Electrónico: alondra@bagatella.mx

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23 mayo, 2024

Ajedrez para principiantes: Entiende este principio paso a paso

 


Ajedrez para principiantes: Entiende este principio paso a paso. Aprendiendo desde cero.


En la presente entrada aprenderás cómo jugar ajedrez desde cero, paso a paso entenderás los principios necesarios para dominar esta extraordinaria disciplina.


Las partidas de ajedrez suelen ser un mundo de posibilidades en donde cada jugador tiene cualquier cantidad de jugadas a la mano, por lo que optar por la mejor de todas, no es tarea fácil, sin embargo, los más experimentados pueden hacerlo y esto lleva a muchos principiantes a preguntarse cómo lo hacen, y acá, les compartiremos el principio que todos deben manejar para conseguir eso.

Principiantes en el ajedrez

Todo aquel que se interesa por el ajedrez, indudablemente comenzará por el nivel básico o inicial, comúnmente conocido como principiante, palabra que denota que el jugador no solo está conociendo las reglas y estrategias, sino que aún está muy lejos de dominarlas, llevándolo a cometer errores que cualquier otro jugador con algo de experiencia, no cometería o por lo menos, sería muy improbable que pasara.


Al comienzo, es normal no estar familiarizado con estas y por ende, es muy probable saltarnos aspectos fundamentales que podrían ayudarnos a ganar una partida y por el contrario, al no estar al tanto de lo que deberíamos hacer, nuestro control de las piezas tienden a ser más frágil y en consecuencia, para un jugador más experimentado, no le es tan difícil superar nuestras estrategias.


Si bien es normal que al principio no tengamos una visión clara de lo que hacemos en el tablero, nuestro deber, en el caso de que queramos seguir mejorando, es conocer con más detalle las reglas que rigen este juego y una vez las hayamos entendido, el siguiente paso será dominarlas, y al hacer eso, finalmente podremos salir del rango principiante y comenzar a tener partidas de mayor nivel.


Teniendo en cuenta lo anterior, lo primero que un principiante en el ajedrez debe conocer, son las reglas y en cierto modo, son bastante sencillas, al menos las más esenciales, por lo que muy probablemente con un solo día o quizás dos, podremos recordarlas, y en este caso, haremos un repaso por todas estas para ir afinando el punto clave al que queremos llegar en estas líneas.

Reglas del ajedrez

Las reglas en el ajedrez, son muy variadas, ya que velan desde los aspectos que deben cumplir los jugadores, hasta el movimiento que puede hacer cada pieza, y con el primero de estos, nos referimos a las condiciones que cada jugador debe cumplir para que se pueda dar una partida en igualdad de condiciones, mientras que el segundo punto, engloba la forma en la que cada una de las piezas interactúan en el tablero.


Con eso en mente, haremos una división de las reglas, aunque debemos dejar en claro, que esta división que hacemos acá, es una forma personal de poder entender mejor las reglas y que sea más sencillo para los principiantes poder conocerlas, y esto quiere decir, que a nivel de estudios en el ajedrez, no está contemplado, por lo que no las conseguirán descritas de esta manera en otro lado.


Entonces, habiendo aclarado esto, procederemos a lo que nosotros llamaremos, reglas del ajedrez dirigidas a los jugadores, siendo estos los aspectos que deben cumplir para que la partida sea justa para ambos.

Reglas para los jugadores

Las reglas de los jugadores, cubren todos los detalles que están expresamente dirigidos a ellos, como lo serían guardar silencio durante el turno del adversario, jugar una sola pieza en su turno, entre otros similares, lo que se traduce, en no hacer trampa, el cual es el principio básico para que una partida pueda desarrollarse como debe ser.

No hacer trampa

Como principiantes que somos, debemos acostumbrarnos a nunca hacer uso de jugadas o comportamientos indebidos que pongan en desventaja al rival o que de plano, nos den una ventaja injusta, ya que formar nuestras habilidades con unos cimientos como esos, tarde o temprano nos llevará a un punto en el que simplemente no mejoraremos por más que lo hagamos.


En otras palabras, para mejorar, se necesita habilidad, habilidad que no tenemos porque en lugar de aprender a jugar, nos dedicamos a crear situaciones desfavorables, por lo que en resumidas cuentas, no debemos hacer trampa.

Las partidas son de 1 contra 1

Ahora que estamos de acuerdo en que no debemos hacer trampa, el siguiente paso es definir las partidas, quiénes se enfrentarán y las condiciones que hay cumplir. En líneas generales, las partidas siempre son de 1 vs 1, en donde cada jugador controla un lado del tablero, ya sea con las piezas blancas o negras.


Sin embargo, puede haber ciertas excepciones si como jugadores, se acordaron antes, como lo sería contar con ayuda de un tercero o que las partidas sean de 2 vs 2, no obstante, hay que tener en cuenta que estos acuerdos, son solo para partidas amistosas, ya que en las oficiales, siempre usarán el formato previamente dicho, 1 contra 1.


Como se puede leer, las reglas del ajedrez en el caso de los jugadores, son bastante simples de cumplir y se resumen, en no hacer trampa y jugar partidas de 1 contra 1. En cuanto a lo de no hacer trampa, no entraremos mucho en detalle, ya que es muy extenso todo ese apartado.


Podríamos decir que hablar mientras el adversario juega, es desconcentrarlo, podríamos decir que mover una pieza cuando no es nuestro turno, es hacer trampa, podríamos decir que recibir ayuda de un tercero, es hacer trampa, y en general, podemos englobar hacer trampa todo acto que perjudique la partida del adversario del mismo modo que nos beneficie a nosotros.

Reglas para las piezas / tablero / partida

En esta sección, terminamos de englobar el resto de reglas que debemos cumplir para jugar una partida de ajedrez en condiciones justas para ambos jugadores, por lo que ahora veremos todo lo que compete para las piezas, el tablero y la partida en general.


Es importante tener presente que al igual que las reglas para los jugadores, este otro conjunto de reglas, los hemos definido de esta forma para poder separarlos o filtrarlos de tal manera, que los principiantes puedan identificarlos con mayor facilidad.

Piezas menores

En el ajedrez, hay un total de 32 piezas, de las cuales, son 16 para cada jugador, y estas piezas a su vez, tienen formas específicas de jugar, por lo que se dividen en 2 categorías, piezas menores y mayores, y esto se debe, al puntaje que cada una de estas tiene al momento de ser capturadas..


En este caso, comenzaremos por los peones, en donde cada jugador cuenta con 8 y se trata, de la pieza básica por excelencia, ya que solo pueden moverse una casilla por turno, salvo en su primer movimiento, en donde el jugador puede decidir si moverse un espacio o 2. El peón puede capturar solo en diagonal y siempre hacia adelante, siendo la única pieza que no puede retroceder.


Luego tenemos al caballo, del cual solo tenemos 2 unidades y este, puede moverse en L, contando con la peculiaridad de que puede saltar piezas tanto aliadas como enemigas. El siguiente es el alfil y al igual que el caballo, tenemos 2, y estos, pueden moverse en diagonal todas las casillas que queramos siempre y cuando no estén bloqueadas.

Piezas mayores

Ahora pasamos a las piezas mayores, comenzando por la torre y se trata de una de las más fuertes, ya que puede moverse en línea recta tanto de forma vertical como horizontal, convirtiéndose en una de las más fáciles de usar y gracias a esto, como principiantes, podemos generar una gran presión sin tener mucha experiencia, ya que la versatilidad que ofrecen, puede complicarle la partida a cualquiera.


La siguiente es la reina, también conocida como la dama y en definitiva, es la pieza más imponente y con mayor presencia de todo el tablero y con justa razón, ya que puede moverse tanto en diagonal como en línea recta todas las casillas que queramos mientras no estén bloqueadas, por lo que prácticamente, se trata de una combinación entre el alfil y la torre.


Por último, tenemos al rey, la pieza principal, ya que de la seguridad de esta, depende de si ganamos o perdemos la partida. El rey si bien es la más importante, está lejos de ser la más fuerte, ya que solo puede moverse 1 casilla por turno, aunque en la dirección que queramos, lo que compensa medianamente su poca movilidad, y ya con esto, hemos revisado las 16 piezas, las cuales se distribuyen en 8 peones, 2 caballos, 2 alfiles, 2 torres, una dama y un rey.

Tablero

El tablero del ajedrez, es donde se llevará a cabo la partida, y este, está compuesto por un total de 64 casillas que están intercaladas entre una de color blanco y otra de color negro, o en su defecto, para otros modelos, puede que no se usen los colores antes mencionados, por lo que pueden ser suplantados siempre y cuando se mantenga la estética de uno claro y otro oscuro.


Cada jugador debe posicionarse en un extremo del tablero, y delante de este, deben tener sus 16 piezas, las cuales han de cubrir 2 filas completas, en donde la posterior, estará ocupada por las piezas con mayor movilidad, caballos, alfiles, torres, reina y rey, mientras que en la siguiente, veremos a los 8 peones.


Con todo lo que hemos descrito, es necesario que cada jugador respete el número de casillas que puede moverse dependiendo de la pieza que esté usando, y mientras se mantenga esa dinámica, estaríamos cumpliendo con las normas o reglas que abarcan esta sección.

Partida

Por último, tenemos las reglas de la partida en general y esta, comprende el momento en cuándo se inicia y cuándo termina, al igual si hay tiempo de por medio o no. En ese sentido, una partida comienza cuando se mueve la primera pieza, siendo estas del lado de las blancas.


En cuanto a la terminación de la partida, esta normalmente finaliza cuando el rey de cualquiera de los 2 jugadores, es capturado y para ello, hay que hacer jaque mate, el cual comprende dejar a esa pieza sin la posibilidad de escapar a ningún lado.


Por otro lado, también podemos decidir si la partida se juega con tiempo o no, y para ello, solo se necesita un reloj, el cual deberemos fijar para que muestre un conteo hasta que llegue a 0 o en su defecto, alcance el tiempo que hemos estipulado.


Si este es el caso, cada jugador deberá activar su tiempo al momento de comenzar su turno, y detenerlo una vez finalice su movimiento. Esto obliga a los jugadores a ser mucho más rápidos, lo que podría llevarlos a cometer errores que se castigarán muy caro.


Si se juega con tiempo, las piezas pasan a tener un puntaje, ya que es posible que este se acabe sin que el rey haya sido capturado y en esas situaciones, se suman los puntos de todas las piezas capturadas, siendo estos los siguientes:



Puntaje de piezas en el ajedrez

Pieza

Puntos

Peón

1

Caballo

3

Alfil

3

Torre

5

Reina / Dama

9

Rey

Incalculable, capturarlo significa ganar o perder la partida directamente.

Etapas de una partida de ajedrez

Hasta ahora, hemos revisado las reglas, por lo que poco a poco nos estamos acercando al principio clave que debemos conocer para poder dominar nuestras partidas, pero antes de eso, aún queda repasar un aspecto más y se trata, de las etapas que tiene un juego de ajedrez.


Estas etapas, se definen por el tiempo en el que se van desarrollando, y por ende, se pueden dividir en 3, siendo estas la apertura, el juego medio y el cierre o final, y como se habrán dado cuenta, los nombres que reciben, describen relativamente en qué se centra cada una, pero aun así, es necesario desglosar todas las características que abarcan.

Apertura

Comenzamos por la apertura y se trata precisamente, del comienzo de una partida. Esta etapa tiene 3 objetivos primordiales y como jugadores, es necesario que los consigamos los 3 para poder plantar una partida a la altura.


Estos 3 objetivos consisten en desarrollar las piezas, controlar el centro y proteger al rey, y si bien no tienen un orden específico en el que debemos ejecutarlo, lo cierto es que debemos cumplir con las 3 o por lo menos, llevarlas a cabo lo mejor que nos sea posible.


En este caso, desarrollar las piezas, consiste en que movilicemos la mayor cantidad posible o en su defecto, aquellas que nos servirán para armar nuestras estrategias, por lo que es necesario que nuestro peones abrán paso al resto de nuestras piezas, lo que facilitará un mayor ataque al igual que una mejor defensa.


Luego tenemos el centro, en donde debemos lograr que nuestras piezas controlen la mayor cantidad de casillas posibles, evitando que el adversario pueda desplegar sus piezas al mismo tiempo que nosotros seamos capaces de movernos con mayor libertad.


Y por último, tenemos la protección del rey, y acá, debemos ubicarlo en un lugar en donde no sea de fácil acceso y cuente con varias piezas protegiéndolo y por lo general, se suele usar el enroque. Cabe resaltar que la apertura dura alrededor de 13 turnos, y por ello, debemos jugar nuestras piezas con cuidado.

Juego medio

El juego medio dependerá de qué tan bien hicimos la apertura, por lo que si no conseguimos desplegar nuestras piezas, ni controlar el centro ni proteger al rey, es casi una certeza que nuestro adversario tiene la partida ganada, pero en caso de que hayamos hecho las cosas bien, tendremos un amplio margen para jugar.


Con las piezas desplegadas, el centro controlado y el rey protegido, ya podemos armar estrategias lo suficientemente fuertes como para empezar a debilitar el tablero del rival, lo que nos llevará a la tercera y última etapa.

Cierre o final

El cierre o final, es el punto culmen de una partida, en donde debemos comenzar a atacar al rey. Ya para este momento, el tablero muy probablemente esté mermado y sean pocas las piezas que aún estén en pie.


Esta etapa se destaca porque comenzamos a ver jaques más seguidos y también, es donde vemos diferentes estrategias para finalmente, acorralar al rey hasta el punto en que no tenga escapatoria y se termine el encuentro.

El principio clave del ajedrez

Finalmente hemos llegado al tema que más nos interesa y se trata del principio que es clave para dejar de ser principiantes. Es importante destacar que en un comienzo, será difícil dominar esta estrategia, por lo que la práctica será primordial en todo esto.


Ahora ¿en qué consiste este principio? Este se enfoca en dominar el centro del tablero, pero ¿qué quiere decir esto? ¿Cómo se domina el centro del tablero? Para ello, es importante haber repasado las etapas de una partida, ya que la apertura, es el mejor momento para apoderarnos del centro aprovechando que es un terreno neutral.

Controlando el centro

Para controlar el centro, se pueden hacer uso de diversas estrategias, pero una de las más sencillas y de menor riesgo, son los peones, y si bien pueden moverse tan solo 1 casilla por turno, si hacemos uso de su doble movimiento, cubriremos más espacio y si perdemos alguno, no significará un golpe muy duro a nuestras filas.


Controlar el centro, es el principio para capturar al rey adversario, ya que cubrir esas casillas, implica que tenemos mucho más espacio para desarrollar nuestras piezas sin la amenaza del rival y por el contrario, él no solo tiene menos espacio, sino que debe lidiar con la constante presión de que podemos capturar sus piezas.


Una vez que logremos dominar el centro, el ritmo de la partida la tendremos nosotros, por lo que el adversario prácticamente estará obligado a defenderse y esperar a que nos equivoquemos para poder remontar, pero caso de que nos mantengamos firmes, simplemente será cuestión de tiempo para que ganemos la partida.

Ajedrez: Controla el centro y la partida será tuya

Controlar el centro del tablero implica una mejor movilidad de nuestras piezas, lo que a su vez se traduce, en un mejor desarrollo para nosotros, sin embargo, conseguir esto no es nada sencillo y por tanto, era necesario que viéramos una vez más, conceptos y descripciones que ya hemos revisado con anterioridad.


Conocer las reglas, las piezas, su movilidad y las etapas de una partida, son cruciales para poder comprender no sólo la importancia de controlar el centro del tablero, sino que también, nos ayuda a idear mejores estrategias para conseguirlo.


Con esto presente, podemos decir que pulir nuestras bases, nos ayudará a desenvolvernos mejor en una partida y en este caso, nos ayudará a poner en práctica este principio clave, el cual pudiera parecer no ser tan importante, sobre todo si estiman que con un buen jaque mate, pueden cerrar la partida.


No obstante, llevar a cabo “ese jaque mate”, siempre será mucho más difícil cuantas menos casillas controlemos y ya que queremos mejorar como jugadores, lo mejor es asegurar las partidas como los profesionales que algún día podríamos llegar a ser con la dedicación necesaria.

Sigue a Alondra Bagatella en su sueño de convertirse en la mejor ajedrecista

La joven Alondra, al igual que muchos, está en proceso de mejorar sus habilidades de ajedrecista, por lo que está totalmente abocada a este deporte, llegando a conseguir resultados sorprendentes para su corta edad e incluso, se estima que de seguir así, podría convertirse en una de las mejores, sino que la mejor ajedrecista del mundo.


Sin embargo, para lograr esta hazaña, no solo requiere de esfuerzo, sino también apoyo económico, ya que dedicarse al completo a este deporte, puede ser un tanto costoso y por ende, la pequeña Alondra busca financiamiento para poder seguir adelante con este sueño.


Con lo anterior en mente, los invitamos a colaborar con cualquier aporte que puedan y ayudar a esta talentosa joven a convertirse en la mejor ajedrecista. A continuación les compartiremos los canales de donación, y si tienen alguna duda, pueden comunicarse a través de los datos que les dejaremos más abajo.


Contacto WhatsApp: +52 33 8000 0888 

Correo Electrónico: alondra@bagatella.mx

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